CINE, VIOLENCIA Y DERECHOS HUMANOS

Entre las últimas películas vistas y estrenadas incluyendo una del 9º Festival Internacional de Cine y formación en derechos humanos de las personas migrantes pude apreciar :

Averno el interesante film  boliviano con guión y dirección de  Marcos Loayza, música de Federico Moreira y Gabriel Estrada y fotografía de Nelson Wainstein cuenta las peripecias que vive Tupah, un joven lustrabotas cuando debe ir a buscar a su tío Jacinto, un músico alcohólico al Averno para que toque en los funerales de un importante magistrado.  La película que combina la mitología andina con la inclusión de distintos personajes, puede resultar para el espectador una metáfora de las distintas dificultades que padece un migrante en el traslado desde su hogar de origen hacia nuevas latitudes.

                       

Deja la luz prendida Es una impactante película argentina con guión de Ezequiel Inzaghi, dirección de Alfredo Salinas, música de Dae Sik Kim y fotografía de Rodrigo Ottaviano, que cuenta la historia de Lucas, interpretado con profesionalismo por Adrián Navarro, que desde niño que teme a la oscuridad y de adulto se enfrenta con una verdad que le hace entender la razón de sus temores.

   Con muy logradas actuaciones de Cecilia Maresca como la tía, Miguel Habud como el padre, la película cuenta una historia que permite reflexionar sobre la importancia de conocer nuestra verdadera identidad para tomar decisiones.

       

Disculpas por la demora es una coproducción argentino israelí  escrita y dirigida  por Daniel Burak y Sergio Slutzky con la colaboración autoral de Malem Azzam, la fotografía de Daniel Burak y la edición de César Custodio, Marisa Montes y Andrés Tambornino, que cuenta el reencuentro de Sergio con su primo Mariano, años después de la desaparición de Samuel, padre de éste y el reclamo del hijo por la ausencia de la familia en la época de la represión militar.                             



La quietud es una película argentina escrita y dirigida por Pablo Trapero con la colaboración autoral de Alberto Rojas Apel, la fotografía de Diego Dussel y el montaje de Alejandro Brodersohn, donde se muestra en una estancia familiar con ese nombre el reencuentro de Eugenia encarnada por Berenice Bejó que regresa de París tras el fallecimiento de su padre a ver a su madre en la magistral actuación de Graciela Borges y a su hermana Mía en la destacada interpretación de Martina Gusmán.

    En la relación familiar se observan situaciones de tensión e intensidad poco frecuentes y se develan verdades hasta ese momento insospechadas.

   Secundan con eficacia Joaquín Furriel, Edgar Ramírez e Isidoro Tolkachir.

         

El Ángel es una película entretenida  con guión y dirección de Luis Ortega, que contó con la colaboración autoral de Rodolfo Palacios y Sergio Olguín, la fotografía de Julián Apezteguía, el montaje de Guillermo Gatti y la producción de Pedro Almodóvar, Axel Kuschevatzky, Hugo Sigman y Sebastián Ortega.

 El film es una versión libre de la vida del adolescente Carlos Robledo Puch interpretado magistralmente por Lorenzo Ferro, que combina notas de humor con episodios sangrientos.  

   Se ven sus relaciones con  su amigo encarnado por Chino Darín y con su posterior socio protagonizado por Peter Lanzani, los robos con asesinatos y la relación con sus padres en las actuaciones de Cecilia Roth y Luis Gnecco y los progenitores de su amigo, en las participaciones efectivas de Mercedes Morán y Daniel Fanego.

   Es una película que a pesar de lo tremendo del tema tratado, despierta simpatía por el protagonista.