Final del juicio de Roberto Cossa con dirección de Jorge Graciosi, sonido y efectos especiales de Malena Graciosi y vestuario y escenografía de Héctor Calmet, muestra con ironía la relatividad en la valoración de las acciones humanas.
Un hombre que ha muerto, Jalil, encarnado por Juan Manuel Romero, se encuentra ansioso en una antesala esperando el juicio final, recordando episodios de su vida, que supone merecen un crédito favorable pero su letrado patrocinante interpretado por José María López le hace ver las malas consecuencias que tuvieron en la realidad algunas de sus buenas acciones.
Carlitos en la actuación de Federico Alí, es un secretario, que va y viene desde donde el tribunal delibera hasta la sala de espera y anuncia cambios en los criterios de los jueces que pueden modificar el destino del enjuiciado.
La obra interpretada por este trío destacado es un contrapunto actoral donde cada uno muestra su calidad profesional brindando credibilidad a una situación imaginaria, que nos permite reflexionar sobre las decisiones humanas y sus consecuencias.
Se presenta los sábados a las 19,30 hs en Rodríguez Peña 943 en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires con entradas de 80$ para jubilados y estudiantes con credencial y 130$ para público en general.
Síndrome de amor de Miriam Martino, inspirada en la canción de Víctor Heredia con textos de Federico García Lorca, Armando Tejada Gómez y propios va configurando una historia de amor no convencional presentada por dos madres la de Juan encarnada de forma magistral por Lidia Catalano, quien canta y baila en escena y la de Pedro interpretada con solvencia por Miriam Martino.
Las dos muestran con amor distintos aspectos de las vidas de sus hijos desde el nacimiento hasta que la adversidad se apoderó de sus destinos.
El amor de madres cantado y contado en distintas escenas les permite una mirada comprensiva e indulgente frente a las decisiones que ellos asumen y las consecuencias que éstas les deparan.
La obra plantea una situación dramática que se despliega a través del discurso poético de ambas actrices que se destacan con multiplicidad de recursos interpretativos, hábilmente dirigidas por Corina Fiorillo , con la adecuada musicalización y arreglos de Rony Keselman y la notable coreografía de Mecha Fernández permiten al espectador disfrutar de un espectáculo conmovedor.
Se presenta los domingos a las 18 hs en la Sala Carlos Somigliana con entrada de 80$ para estudiantes y jubilados y 130$ para el público en general.
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