Este año se inició la temporada teatral en el Teatro Nacional Cervantes, con obras que ponen a la mujer como protagonista en escena. Pude ver entre las que se presentaban :
Adela duerme serena escrita por Teo Ibarzábal y dirigida por Andrea Garrote en la sala Orestes Caviglia muestra en escena dos situaciones que pueden confundir inicialmente al espectador y evidencian la realidad fragmentada de la protagonista superponiendo dos secuencias temporales.
En una de ellas Adela, una mujer de mediana edad interpretada magistralmente por Laura López Moyano, con sus desequilibrios e incoherencias aleja del hogar a su marido encarnado con profesionalismo por Mariano Sayavedra y a su hijo mayor en la eficaz actuación de Valentino Grizutti, siendo el hijo menor, más sensible y vulnerable protagonizado con maestría por Emilio Vodanovich, el que se hace cargo de cuidarla.
En la otra, se observa una mujer mayor casi inerte protagonizada por Amanda Busnelli, quien tiene un hijo adulto que la acompaña en su vejez tocando la guitarra, rol desempeñado por Federico Marquestó.
La obra se presenta de jueves a domingo a las 21 hs con entradas de 280$ con descuento a jubilados y estudiantes hasta el 22 de marzo.
Teoría King Kong escrita por Virginie Despentes en Francia en el 2006 en la Sala María Guerrero, consta de tres textos traducidos por Paul B Preciado en versión de Alejandro Maci, quien se ocupó del diseño audiovisual realizado por Julian Setton. La iluminación estuvo a cargo de Eli Sirlin, el vestuario es de Ana Markarian, la escenografía corresponde a Micaela Sleigh y la producción a Silvia Oleksikiw.
Pude ver dos de las tres obras, que son lectura de textos con un video de fondo:
Chica King Kong presentada por Mercedes Morán dirigida por Romina Paula con la asistencia de Matías López Stordeur, donde se inicia el texto con una nueva versión e interpretación de la relación de la chica rubia que se encuentra en la mano de King Kong para luego plantear una deconstrucción de los arquetipos femeninos y masculinos que promueve la sociedad capitalista.
El texto resulta inteligente, irónico e irreverente frente a las formulaciones establecidas de lo que debe considerarse femenino. También muestra cómo los arquetipos masculinos establecidos condenan al hombre a cumplir con un modelo que no lo hace feliz.
Muy buena lectura expresiva del texto por parte de la actriz que logró trasmitir la ideología de la autora con emoción.
Durmiendo con el enemigo presentada por Soledad Silveyra con dirección de Claudio Tolcachir que contó con la asistencia de Matías López Stordeur, reitera en su parte inicial el texto final de la obra anterior, mostrando la autora una mirada empática hacia los prototipos femeninos y masculinos desvalorizados socialmente.
Luego describe autobiográficamente su incursión voluntaria en la prostitución luego de haber sufrido una violación y hace una apología del derecho a ofrecer sexo por dinero, brindando una mirada distinta sobre las relaciones humanas.Soledad Silveyra hace una dramatización de la lectura donde demuestra sus condiciones histriónicas y se despliega por la escena con soltura, acompañada por la música y el video adecuado.
Ayer con esta obra finalizó el ciclo Teoría King Kong que me enteré que estaba programado desde la anterior gestión. Sería interesante que en la nueva gestión tuvieran en cuenta el Ciclo "El teatro del país" que reunía autores y elencos de las distintas provincias argentinas y el Festival Latinoamericano de Teatro, donde se veían obras de autores y elencos de vecinos países. Ambos ciclos resultan más afines con la idiosincrasia del público en general por el contenido de sus obras y las problemáticas abordadas.
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