miércoles, 21 de febrero de 2018

DOCUMENTAL Y FICCIÓN EN LA PANTALLA GRANDE

Tuve la posibilidad de ver en una tarde de cine tres películas; un documental y dos de ficción que pueden interesar a distintos tipos de público.  Ellos son:

Mirala (que linda viene...) es un documental sobre el largo proceso de ensayo y preparación de la murga "Los cometas de Boedo" fundada en 1959, con sus coreografías, cantos y música.  El director del film, Javier Pernas,  combina el blanco y negro con el color para  mostrar de manera minuciosa a través de las distintas etapas los entretelones del espectáculo, la función de los directores  y  el resultado final con sus aciertos y dificultades.


 Un film interesante para los que gustan de los festejos del carnaval con sus murgas y comparsas.

Las grietas de Jara es una película de estreno reciente basada en la novela homónima de Claudia Piñeyro, escrita y dirigida por Nicolás Gil Lavedra con la colaboración autoral de Emiliano Torres, la música de Nicolás Sorín y el montaje de Alberto Ponce que evidencia cómo el ser humano puede llegar a extremos que no creía posible para defender intereses.

  La historia comienza cuando Leonor, una joven fotógrafa interpretada con profesionalismo por Sara Sálamo, va al estudio de arquitectura de Mario Borla y su socia Marta Horvarth encarnados con eficacia por Santiago Segura y Soledad Villamil a preguntar por Nelson Jara en la lograda  actuación de Oscar Martínez.

  La atiende Pablo Simó, un arquitecto que trabaja desde hace veinte años en la empresa, protagonizado de manera convincente por Joaquín Furriel, quien entabla una relación con Leonor  y a partir de ésta empieza a conocer más a Nelson Jara a través de un cuaderno que ella le facilita y esto lo detemina a tomar decisiones que no hubiera imaginado.

  La película es apta para mayores de 13 años con reservas.

 
El sereno es una coproducción uruguayo-argentina, codirigida por Oscar Estévez y Joaquín Mauad, con guión de Oscar Estévez y Federico Roca, la adecuada fotografía de Diego Pavese y la excelente música generadora de climas de Hernán González.

   La película que genera suspenso y en ocasiones terror, con cierto tinte surrealista muestra a Fernando interpretado adecuadamente por Gastón Pauls, que es contratado como sereno en un depósito que va a ser demolido.  En las noches se alterna la vigilia con imágenes de pesadilla donde Fernando va descubriendo un pasado que prefiere no recordar.

   La realidad le brinda una segunda oportunidad donde sabe que debe reconstruir su vida.

   Secundan con eficacia César Troncoso, Álvaro Armand Ugon, Cecilia Caballero,Valentina Barrios y Lalo Labat.

     El film es apto para mayores de 13 años con reservas.


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