jueves, 2 de octubre de 2014

LA VIOLENCIA ESTÁ DE MODA EN LAS NUEVAS PRODUCCIONES FILMICAS

La exitosa "Relatos salvajes" de Damián Zifron muestra en seis relatos breves cómo la perdida del control, la ira y la conducta violenta premeditada o imprevista ocasionan situaciones grotescas con humor negro que convocan a un público masivo que se siente identificado en algunos aspectos con los protagonistas.
Comienza el film con Pasternak, un hombre humillado que decide con astucia estratégica reunir en un viaje mortal a los que le han hecho daño en su vida.  Muy buenas actuaciones en este corto donde ni los padres del víctima-victimario se salvan de la tragedia.
Continúa con "Las ratas" ambientada en una cafetería desierta donde la camarera atiende a un hombre que dañó seriamente su vida, pero al que no se atreve a enfrentar.  Sin embargo la cocinera, interpretada magistralmente por Rita Cortese concreta la venganza con veneno para ratas.
"El más fuerte" es un contrapunto actoral donde Leonardo Sbaraglia se maneja con profesionalismo y  muestra a dos hombres en una ruta pasan del insulto a la violencia extrema.
"Bombita" con la excelente actuación de Ricardo Darín nos permite ver el grado de alienación a que puede conducir a un ingeniero en explosivos la burocracia institucional.
"La propuesta" nos muestra los valores que predominan en la sociedad capitalista, donde todo se puede comprar o vender hasta la vida y la seguridad.  Destacadas actuaciones de Oscar Martínez y Osmar Nuñez.
"Hasta que la muerte nos separe" nos muestra un típico casamiento judío donde las apariencias encubren una realidad mortificante y la reacción de una novia engañada, que muestra su despecho de una manera desopilante.  Brillantes actuaciones de Erica Rivas y Diego Gentile.
La obra merece numerosas distinciones porque es amena y desde el grotesco permite la reflexión sobre la conducta humana.

   Otra película reciente donde se observa la conducta violenta a partir de una situación  cotidiana es "Arrebato" con guión y dirección de Sandra Gugliotta.

    Luis Vega, un profesor de Literatura y escritor, interpretado con solvencia por Pablo Echarri, a pedido de su editor, un personaje muy logrado por Claudio Tolcachir, tiene que investigar el crimen de un odontólogo para escribir una novela.  Se entrevista con la esposa, encarnada por Leticia Bredice, que muestra su habitual soltura en el papel y confirma que ella lo asesinó.  Sin embargo no existen evidencias que la inculpen.

   A partir de la redacción del libro, algo cambia en el escritor que le permite ver que un crimen puede quedar impune y viendo que su matrimonio aparentemente feliz con Carla, encarnada con verosimilitud por Mónica Antonópulos, se deshace sin posibilidad de reparación, decide matar a su amante empleando estrategias similares a las escritas en su novela.

   Es una película interesante, con buenas actuaciones y que puede concitar la atención de un público amante del relato policial

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