Los dos estrenos y la reposición que paso a comentar pueden interesar a públicos diversos, cabe destacar en las tres películas una lograda producción.
Pescador: con guión y dirección de José Glusman, quien contó con la colaboración autoral de Iván Tokman, la excelente fotografía de Nicolás Trovato, la música de Fernando Iguacel y el montaje de Emiliano Serra, que permiten el ritmo narrativo que la película requiere.
El film se desarrolla en una playa alejada donde tres jóvenes amigos deciden inaugurar un parador. Cerca de éste vive Santos, encarnado por Darío Grandinetti, un pescador solitario y poco comunicativo, que logra establecer vínculo con Franca, interpretada por Jazmín Esquivel, una de las integrantes del parador y cuando la situación se torna crítica para ambos por distintos motivos le brinda una salida brillante.
Secundan con eficacia Juan Grandinetti y Matías Marmorato como los otros dos jóvenes del parador, Emilio Bardi como el amigo de Santos, Darío Levy como el gestor municipal y Gigí Rua como la abogada. Una película apta para mayores de 16 años que puede disfrutar al público amante del género policial.
27:El club de los Malditos escrita y dirigida por Nicanor Loreti con la colaboración autoral de Alex Cox, la música de Pablo Sala y la producción de Néstor Sánchez Sotelo y Esteban y Hori Mentasti.
La película comienza con la muerte de un cantante de rock interpretado por el polaco el día de su cumpleaños 27 cuando cae desde la altura y una fan encarnada por Sofía Gala Castiglione que no ha sido invitada filma la caída. Ante el hecho se asigna a Martín Lombardo en la convincente actuación de Diego Capusotto, que muestra a un policía poco convencional y bizarro.
Secundan con adecuadas actuaciones Daniel Araoz, Willy Toledo, Nair Awada y Paula Manzone.
El film es una ucronía que muestra el triste final de algunos reconocidos cantantes en su cumpleaños 27 en blanco y negro indicando que la muerte fue efecto de una conspiración y emplea recursos de la ciencia ficción para volverlos a la vida para la batalla final. Es apta para mayores de 13 años y puede resultar muy divertida para los admiradores de Capusotto y los que gustan del género de acción.
Mamá se fue de viaje:dirigida por Ariel Winograd, que contó con el desopilante guión de Mariano Vera, la adecuada fotografía de Félix Monti y el preciso montaje de Pablo Barbieri para realizar una comedia que deleita a grandes y chicos.
La historia muestra a Vera, interpretada por Carla Peterson, una mujer cansada del poco reconocimiento que tiene su tarea de ama de casa y madre, que decide irse de viaje dejando a su marido Víctor Garbo en la magistral actuación de Diego Peretti, a cargo de sus cuatro hijos durante ese período. Se dan múltiples situaciones donde Víctor se encuentra desbordado y comprende que llevar adelante la rutina diaria de una familia no es tarea fácil.
Secundan con solvencia y profesionalismo Pilar Gamboa como la nueva empleada, Martín Lacour como Bruno el hijo mayor, Agustina Cabo como la hija, Julián Baz y Lorenzo Winograd como los dos hijos menores, Muriel Santa Ana y Guillermo Arengo como la pareja amiga, Martín Piroyanski como el empleado rival de Víctor y Mario Alarcón como su jefe. Es una película muy divertida.
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